¡Día de muertos! Celebración mexicana declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial.
Conoce la importancia y el significado de una las tradiciones más emblemáticas de los mexicanos en el mundo.
DÍA DE MUERTOS EN MÉXICO
Parte de la identidad de nuestro país es la singular mezcla de usos, costumbres y tradiciones, y entre todas ellas, el día de muertos ocupa un lugar muy especial. Esta celebración, declarada en 2008 por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, es quizá una de las mejores muestras del sincretismo religioso y cultural producto de la fusión de las creencias prehispánicas (donde la muerte era considerada una etapa más dentro del ciclo de la vida) y la fe católica que llegó a México de la mano de la conquista y colonización española.
Aunque en cada región las costumbres pueden variar, por lo general hay un día específico para recordar a las almas de los difuntos. Así, el 28 de octubre se dedica a aquellos que fallecieron por un accidente, el 29 de octubre a los ahogados, el 30 de octubre a los olvidados, el 31 de octubre a quienes están en el limbo, el 1 de noviembre a los niños y el 2 de noviembre a los adultos.
En cualquier caso, durante esos días la constante es el colorido, la creatividad y los platillos especialmente preparados para las ofrendas de muertos, y donde el típico pan de muerto es uno de los grandes protagonistas.
Realizar el recorrido hacia la Isla de Janitzio en Pátzcuaro, viajar a la Huasteca para el Xantolo o a Península de Yucatán para el Hanal Pixán, asistir al festival La Calaca en San Miguel de Allende o visitar los altares de muertos de Naolinco, Veracruz, así como los de la Casa del Indio Fernández en Coyoacán o el Museo Dolores Olmedo en Xochimilco son algunas de las emblemáticas y populares experiencias que podrás vivir en los próximos días y que sin duda honran la memoria de quienes nos preceden en el más allá.